O D I N E A

domingo, 4 de noviembre de 2007

Roberta Blest


Mito de la salvación


Muchachos todos presentes. Hoy me hice yo. Me descubrí en medio de la colilla de un cigarro, tarareando "chuchetumadre". Ahí estaba yo. Inexplicablemente se formó una nebulosa turbia, extemporánea y entrevuelta de recovecos extravagantes. Ahí estaba yo. Vestida de un verde crepúsculo, retardado y bello. Una burbuja enorme me recorría los senos, entusiasmada. Y ahí me desperté yo. Fue tan exótico, que decidí posar uno de mis pies en la órbita terrenal. Y me enamoré. Una mujer me mostraba sus piernas, delicadas, atardecidas. Y la toqué.

Y
ME
HICE
YO